Por: Ayline, 15 años.
Activista peruana, fue participante de GirlGov Perú 2020 y actual miembro de la colectiva adolescente Tu y yo en línea.
“Niñas desde los 14 años se casan por acuerdos entre sus padres y hombres mayores generalmente desconocidos”. Hace unos años una profesora del colegio nos contó que esta es una situación común en pueblos del interior del país. No podía ocultar mi indignación, ¡yo tenía esa edad! Lo hablé con mi mamá y me contó aún más casos.Lo hablé con mis amigas y todas estaban sorprendidas como yo, pues no pensaríamos en casarnos tan jóvenes menos con un desconocido. Esto me llevó a investigar y encontrar el decreto legislativo 1384 del artículo 42 del Código Civil que abrió la posibilidad del matrimonio a partir de los 14 años.
El Matrimonio Infantil es una realidad, que pone en riesgo el futuro de muchas niñas y adolescentes menores de edad .Las normas de género establecidas desde sus propias familias, entre otras expresiones de desigualdad de género, las obliga a entrar en este tipo de relaciones.
Según cifras del INEI, en Lima, la prevalencia (del matrimonio infantil) es del 20%, en Cusco de 28; en Piura, 32% y en Loreto es casi el 50%.Pero, ¿Cuáles son sus causas ?, la ONU según su estudio: “Las siete causas del matrimonio infantil en América Latina” del 2019, las identificó a través de varios testimonios, una de las principales es lla vulnerabilidad económica. Las víctimas confiesan que mediante esa unión sus familias tendrían “una boca menos que alimentar”. Otra de las razones serían las normas masculinas dominantes como los roles de género, muchas víctimas consideran que los ‘verdaderos hombres’ son los que tienen dinero, ya que ese ese es su deber.
Y ¿Cuáles son las consecuencias?, una de las consecuencias son los embarazos a temprana edad, un riesgo a su salud física y mental, esto se debe a que no tienen acceso y/o la desinformación para exigir algún tipo de protección contra embarazos no deseados. Otra preocupante consecuencia son los abusos y maltratos de diversos tipos al asumir roles de “la mujer del hogar”. Finalmente, el abandono de sus estudios. Al no tener estudios completos, las posibilidades de encontrar un trabajo estable son más escasas.
Sin embargo, esta realidad podría cambiar gracias al Proyecto de Ley 5871, que presentó la congresista Arlette Contreras para eliminar el último párrafo del artículo 42 del decreto legislativo N° 295, del Código Civil. De esta manera, se pretende erradicar el “matrimonio precoz y forzado de personas menores de 16 años”.
El estudio de la ONU mencionado también ofrece alternativas para enfrentar los casos de matrimonios forzados. Entre ellas “Fortalecer las voces de las niñas como agentes de cambio para que ellas hablen por sí mismas y expresen su opinión en contra del matrimonio infantil”, de esta forma muchas niñas y adolescentes podrán vivir en libertad.
¿Qué podemos hacer nosotros acerca de esta situación? Es un deber de todos informarnos más para tener herramientas de apoyo si llegamos a oír de un caso. Por ejemplo, la línea 100 del Ministerio de la Mujer ofrece apoyo legal y psicológico para las víctimas de maltrato. También podemos generar consciencia sobre el tema, comentarlo con nuestro entorno y estar pendientes de los avances que se generan en nuestro país al respecto.