Escrito por: Katia, participante del programa Voces Activistas – Cusco
Para reconocer la violencia debemos dejar algunos mitos atrás. La violencia no solo se manifiesta a través de golpes o agresiones físicas, sino que se expresa de forma muy diversa y no siempre es evidente reconocerla. Una de las formas más conocida es la violencia sexual y física. De acuerdo a la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar – ENDES 2018 realizada por el INEI, en la sección ‘Formas de violencia contra la mujer, ejercida alguna vez por el esposo o compañero’, el 58,9% de mujeres encuestadas fueron víctimas de violencia psicológica y/o verbal; el 30,7%, sufrieron violencia física; y el 6,8%, fueron violentadas sexualmente en el Perú.
Otra forma que toma la violencia de género es la violencia económica o patrimonial. Es decir, cualquier acto que impida o limite el desarrollo económico de la mujer creando una dependencia económica. La violencia de cualquier tipo es dañina, ninguna puede ser justificada y no merecemos vivir en un entorno en el cual se pueda presentar cualquier tipo de violencia.
Seamos las voces que unen fuerza para romper el silencio
de nuestrxs compañerxs.
La violencia más común y que más huellas deja en nuestra alma es la violencia psicológica. Esta ha sido definida como “el empleo de insultos, humillaciones, descalificaciones y maltrato psicológico reafirman el poder que el agresor posee sobre la víctima, estableciendo una relación de sujeto-objeto” (Velásquez, 29 2003). A partir del siguiente testimonio recogido del proyecto “Cartas de Mujeres, voces que rompen el silencio de la violencia”1, podemos evidenciar cómo se presenta la violencia psicológica:
“(…) no me dejaba salir a ningún lado, ni con amigos ni familia, y si no le hacía caso él me hacía una escena me gritaba” (Carta 1811)
De acuerdo a la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar- ENDES, el 54,8% de mujeres en el Perú fue víctima de violencia psicológica, física o sexual alguna vez por su esposo o compañero durante el 2020.
Otro aspecto muy importante de analizar es la violencia contra la mujer ejercida durante la pandemia. Sabemos que la pandemia nos afectó a todos, pero ¿habrá afectado a todos de la misma manera? En el caso de las mujeres víctimas de violencia física, ¿se imaginan vivir bajo el mismo techo con su agresor de manera obligatoria sin poder salir a ningún lugar? Es lamentable saber que la violencia no frenó ni por un momento, esta dura realidad se vió reflejada en feminicidios y denuncias que no obtenían respuestas.
La violencia contra la mujer en el Perú es una realidad que cada día viene marcando nuestro vivir cotidiano. Nosotrxs no estamos solxs, nos tenemos en cada momento. Así que analicemos el cómo nos afecta: hay que informarnos del tema para ser una red de apoyo mutua. Seamos las voces que unen fuerza para romper el silencio de nuestrxs compañerxs.
- Voces que rompen el silencio de la violencia. Concurso de Investigación sobre violencia de género. PUCP. https://www.mujereslibresdeviolencia.usmp.edu.pe/wp-content/uploads/2017/03/DARS-GIZWEB.pdf
Este texto se formuló y elaboró en el marco del programa Voces Activistas, iniciativa desarrollada por Quinta Ola y la Organización Internacional para las Migraciones – OIM Perú, gracias al apoyo de la Oficina de Población, Refugiados y Migración del Gobierno de Estados Unidos, del Fondo Canadiense para Iniciativas Locales (FCIL) de la Embajada de Canadá y de la Agencia de la ONU para los Refugiados-ACNUR.